Hay historias en las que brilla de modo especial la victoria del amor sobre el dolor, la desesperanza y toda limitación humana. Una de esas historias la protagoniza Vanesa.
Hoy domingo, día que es eco de la victoria de Jesús sobre la muerte, la despedimos con la confianza de que ya está con Él, y somos testigos de cómo la existencia de Vanesa dará vida hasta al final, pues alguno de sus órganos donado ya permite a otra persona tener esperanza.
Nuestra comunidad parroquial ha tenido la suerte de ser testigo y acompañar la historia de Vanesa, Gloria, Félix padre, Félix hijo y Bene. Es más, en cierto modo no se puede entender la historia de nuestra Parroquia, y la historia personal de muchos de los que forman parte de San Leandro, sin Vanesa.
Nuestra fe nos invita a confiar en que Vanesa ya ha sido tomada de la mano y escucha muy de cerca las palabras impresas en ese cuadro que presidía su casa y todavía hoy el despacho de Cáritas de la Parroquia: “Muchacha, a ti te digo: levántate” (Talitha Kum).
Un comentario
Todo un honor y orgullo, haber estado cerca de Vanesa durante una parte de mi vida, sin lugar a dudas, Vanesa y la Parroquia me aportaron valores que al día de hoy tengo muy presentes. D.E.P.